jueves, 29 de octubre de 2009

La Reforma y las indulgencias modernas.

Martin Lutero clavó sus famosas 95 tesis en la puerta de la catedral de Wittenberg un 31 de Octubre de 1517  debido, entre otros asuntos, a la venta inescrupulosa y desaforada de las famosas "indulgencias". Con ello se marcó un hito histórico que dio inicio a lo que se llamó la Reforma Protestante. Uno de sus puntos fuertes fue la "Justificación sólo por la fe" para distinguirlo de la fe falsa. De aquellos que piensan que pueden comprar su salvación o el perdón de sus pecados por medio de sus obras o influencias. Hoy por hoy, debemos recordar qué entendieron y cómo definieron la fe verdadera de la fe falsa estos reformadores. Los modernos "Tetzels" de nuestro tiempo ofrecen al pueblo "sanidad", "salud", "prosperidad económica", "bienestar familiar", "armonía conyugal", "tan pronto como tú des para Dios, Dios te lo va a multiplicar diez veces". Estos falsos maestros y falsos apóstoles modernos engañan a las almas inconstantes, a los incautos y dejan un sinsabor de frustración en la vida de los verdaderos creyentes. Son vendedores de indulgencias modernas. Jeremías 6.14 sería un buen eco "Y curan la herida de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz,paz; y no hay paz". Sólo que en este caso, eso espero, los seguidores de estos falsos maestros no son "pueblo de Dios".
Como los antiguos reformadores debemos recordar los tres aspectos que encierra una fe genuina o bíblica para contrarrestar a estos modernos vendedores de indulgencias.

1. Notitia = CONTENIDO. Información básica de los fundamentos de nuestra fe. La fe tiene que tener contenido. Usted no puede tener fe en nada. La fe no puede estar vacía. Proposición: “Cristo se levantó de la tumba”. Es una información básica y necesaria que todo cristiano debe tener. Los Evangelios en la Biblia proveen la información necesaria para cualquier prospecto. Creo que toda presentación evangelística debe poseer una información bíblica cronológica y no meramente doctrinal temática. Aclararé en algún otro momento.


2. Assensus = ASENTIMIENTO o la admisión que notitia, o sea que la información es correcta, es verdadera. Y estamos persuadidos o convencidos a creerla. Admitir como cierto. “Cristo se levantó de la tumba”, Assensus dice: “Estoy persuadido a creer que Cristo se levantó de la tumba”. Según los reformadores estos dos aspectos no son suficientes, sólo te dan la “Fe de los demonios” que “saben y reconocen”. En la parábola del Sembrador lo vemos en aquellos que fueron sembrados entre piedras y entre espinas. Pero falta otro aspecto básico y vital.

3. Fiducia = CONFIANZA, descansar. Tenemos la información, admitimos y estamos persuadidos de la verdad del evangelio, ahora debo apropiarme de esa verdad. Confío en tu verdad Dios. Es el paso final de la voluntad humana que transciende el intelecto, pero está basado en él. “Cristo murió por nuestros pecados – creo que Cristo murió por mis pecados (notitia + assensus) – ahora pongo mi confianza en Cristo, mi fe, para el perdón de mis pecados, para salvarme”.

Recordemos, afirmemos y prediquemos que sólo Cristo salva. Y aquél que cree en Él sus pecados le son perdonados por pura gracia. Es justificado por la fe. Leer Romanos 4.

Oh, Señor, creo en Ti en
la salud o en la enfermedad,
en mis penas como en mis alegrías,
en mi pobreza como en mi riqueza.
Declaro yo en este día:
Tú y sólo Tú eres mi confianza
plena de este humano corazón.

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